Tratamiento de los perros y gatos con diabetes


¿Cómo se tratan los perros y gatos diabéticos?

El éxito en el control de la diabetes depende de una rutina regular.

- Inyecciones regulares de insulina

- Alimentación correcta

- Ejercicio regular

- Las perras deberían ser castradas


IMPORTANTE: Solo su Medico Veterinario de confianza puede determinar el tratamiento mas adecuado para su mascota



Manejar la diabetes de su perro o gato puede llevar algún esfuerzo, pero la recompensa bien vale la pena. 

Las mascotas cuya diabetes está bajo control tienen niveles normales de sed, apetito, micción y actividad. Su peso es generalmente estable y hay muchas menos probabilidades de que desarrollen complicaciones.

¿Qué tipo de insulina se utiliza para tratar la diabetes en perros y gatos?

Hasta recientemente, sólo podían utilizarse insulinas humanas para tratar a perros y gatos. Estos preparados tienen una alta concentración de insulina (100 Unidades Internacionales por ml) ya que son para ser administradas a humanos, que tienen un tamaño significativamente mayor que el de perros y gatos. Esto a veces dificulta el tratamiento de animales pequeños, con el riesgo de una sobredosis y otras complicaciones.

Para simplificar la tarea de tratar a un perro o gato diabético, MSD Salud Animal ha desarrollado una insulina específica para uso veterinario llamada Caninsulin®. Esta insulina se comercializa en Europa desde hace más de 15 años y ahora también está disponible en Argentina.  

Caninsulin® es una suspensión acuosa de insulina que contiene 40 UI por ml de insulina porcina altamente purificada, 30 % es insulina zinc amorfa y 70 % es insulina zinc cristalina. 


Usos del Caninsulin® 

Caninsulin, una insulina de acción intermedia, contiene insulina porcina que es estructuralmente idéntica a la insulina canina. Está indicada para el tratamiento de la diabetes mellitus (hiperglucemia y sus signos clínicos asociados) en perros y gatos 

Dosis y administración de Caninsulin® 

Caninsulin debería ser administrado una o dos veces al día, según corresponda, por vía subcutánea. Se debe alternar diariamente el sitio de inyección. Agitar el producto vigorosamente antes de su utilización. Se debe utilizar una jeringa de insulina de 40 UI/ml. Una única inyección diaria es suficiente para estabilizar la concentración de glucosa en un tercio de los perros diabéticos. Sin embargo, la duración de la acción puede variar haciendo necesario administrar la dosis de insulina dos veces al día en algunos perros diabéticos.

En los gatos diabéticos es necesario administrar Caninsulin dos veces al día.

La dosis depende del grado de déficit en la producción de insulina por el propio animal y por lo tanto varía en cada caso.

Tratamiento inicial con Caninsulin

En perros, la dosis inicial diaria es de 0,5 UI por kg de peso

En gatos la dosis inicial diaria es de 1 a 2 UI por gato dos veces al día, con una dosis maxima de 2 UI dos veces al día en la primera semana. Especialmente en gatos obesos, una dosis inicial excesiva puede ser peligrosa. 

Se deben realizar ajustes posteriores para establecer la dosis de mantenimiento aumentando o disminuyendo la dosis inicial en aproximadamente 10 % cada vez de acuerdo a los resultados de las mediciones de las concentraciones de glucosa en la sangre. Normalmente no se deberían realizar alteraciones en la dosis con una frecuencia mayor que cada 3-4 días. 


Mantenimiento con Caninsulin

Una vez que se ha establecido la dosis de mantenimiento y el animal está estabilizado, es necesario implementar un programa de manejo a largo plazo. El objetivo debería ser manejar al animal de forma de minimizar las variaciones en su requerimiento de insulina. Esto incluye controlar para detectar una sub o sobredosificación y ajustar la dosis en caso necesario. Una cuidadosa estabilización y un ajustado control durante el mantenimiento ayudaran a limitar los problemas crónicos asociados con la diabetes, incluyendo las cataratas, hígado graso, etc.

Se han descripto varios enfoques para el mantenimiento. El clínicamente más racional es que el dueño controle y registre el estado general del perro (incluyendo bienestar, sed y apetito) y que controle la glucosa urinaria al menos diariamente. El veterinario revisa el caso cada 2 - 4 meses (o más frecuentemente si hay problemas) incluyendo su registro de salud y glucosa urinaria. En este momento también se mide la glucosa sanguínea.

El veterinario, en base a un análisis de la totalidad de los datos clínicos y las mediciones de glucosa sanguínea realiza los ajustes en la dosis de insulina. 

Es importante la habilidad de los propietarios para reconocer los signos de hipo o hiperglucemia y responder apropiadamente para lograr el control durante la terapia de mantenimiento. La poliuria, polidipsia y polifagia en combinación con pérdida de peso, la mala condición general, la pérdida de pelo o manto anormal y la letargia son los signos clínicos más comunes de hiperglucemia y requiere de la administración de insulina para restablecer las concentraciones de glucosa sanguínea al el rango normal. 


Contraindicaciones, advertencias, etc. 

1. Caninsulin es una insulina de acción intermedia y no está destinada al tratamiento de animales con diabetes aguda severa que se presentan en un estado de cetoacidosis. Caninsulin no debe ser administrado por vía endovenosa. 

2. Se debe evitar el uso de anticonceptivos en animales que sufren de diabetes mellitus. Puede ser necesario considerar la castración. 

3. Se debe evitar el estrés y el ejercicio irregular. Se debe tener cuidado con el uso de corticoides. 

4. Es importante establecer, junto con el propietario de la mascota, un esquema de alimentación estricto que incluirá un mínimo de fluctuaciones y cambios. 

5. La administración de Caninsulin debe estar a cargo de un adulto responsable por el bienestar del animal. 

6. Uso veterinario exclusivo. Mantener fuera del alcance de los niños. 

 

Presentación del Caninsulin: Frascos de 2,5 ml o de 10 ml. 

Almacenamiento del Caninsulin 

Antes de abrir, mantener en posición vertical y refrigerado entre +2 y 8° C. Proteger de la luz. No congelar. Luego de la primera extracción, mantener ya sea refrigerado entre +2 y 8°C o a menos de 25°C. Luego de la extracción de la primera dosis, utilizar el producto dentro de los 28 días. 

La insulina no debería ser congelada ya que esto desnaturalizaría las cadenas de la insulina. Similarmente, se deben evitar las altas temperaturas. 

Previo al uso, agitar frasco vigorosamente hasta obtener una suspensión lechosa homogénea y uniforme. Se debe permitir la dispersión de la espuma que se forma durante el agitado en la superficie del frasco antes de utilizar el producto y, en caso necesario el frasco debe ser agitado suavemente para mantener una suspensión lechosa uniforme antes de usar. En las suspensiones de insulina se pueden formar grumos: no utilizar los frascos si persisten grumos visibles luego de agitar cuidadosamente. Se debe utilizar una jeringa de insulina de 40 UI/ml.

Safebox : Es una caja plástica conteniendo 30 Jeringas de 40 UI/ml, dispenser y descartador.-

 

 

 



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